viernes, 9 de enero de 2015

Medidas de Reconversión Productiva buscan mitigar daños por heladas en ruralidad bogotana


Por.
Angela Matiz
Comunicaciones S.D.D.E.






La Secretaría Distrital de Desarrollo Económico, a través de la sub dirección de Desarrollo Socio económico, es consiente del impacto del fenómeno de El Niño y de que este se debe medir en el corto, mediano y largo plazo, ya que su presencia afectará principalmente labores como: cronograma de siembras, establecimiento y mantenimiento de actividades agropecuarias, consumo de agua, normal desarrollo fenológico de los cultivos, ciclo de vida de plagas y enfermedades, rendimientos, oferta y precios de los productos agropecuarios durante y después de su culminación.



 Uno de los efectos del fenómeno de El Niño, son las heladas. Las heladas en la sabana de Bogotá suceden por el enfriamiento progresivo e intenso del suelo, por radiación de su calor, produciéndose mayormente en las noches de cielo despejado. La humedad atmosférica, que puede ser relativamente cálida y seca, se condensa sobre las superficies sólidas en forma de rocío o congelándose, si aquéllas se hallan a menos de 0ºC. Este evento genera que el agua de las células de las plantas se congele y se rompan (Plasmolisis), con lo que los tejidos de las plantas sufren daño a nivel fisiológico.
Este tipo de condiciones implican una afectación para las actividades agropecuarias, por lo que es importante que los productores acaten las siguientes recomendaciones en sus actividades productivas:
En la ganadería:








 Por la disminución en el consumo de forrajes y el estrés calórico e hídrico, se reduce la producción de leche, carne y la natalidad, por lo que se recomiendan las siguientes acciones:
•             Construcción de pequeños diques en depresiones y hondonadas para recoger las pocas lluvias.
•             Construcción de cobertizos o siembra de árboles para el sombrío del ganado en sabanas o praderas muy descubiertas, que eviten la deshidratación y daños en la piel de los bovinos.
•             Utilización de bloques multinutricionales.
•             Disminuir la carga animal por hectárea, haciendo una mejor redistribución de los animales por potrero o sacando anticipadamente las vacas de baja producción.
•             Establecer planes de suplementos nutricionales con subproductos como: licor o afrecho de cervecería, vinaza, contenido ruminal (mataderos), tallo o vástagos de plátano, melaza, residuos de cosecha (zanahoria, remolacha, papa, plátano, banano, yuca, etc.), pulpas y cáscaras de frutas, henos, tamos tratados con amoniaco o urea, gallinaza, porquinaza, torta de palmiste y subproductos de la industria de la yuca.
•             Utilización de follajes de plantas herbóreas: acacia forrajera asociada a kikuyo aumenta la producción de leche durante el verano. Suplementando con una ración de 20 kg de ray grass por vaca, más 12 kg de acacia forrajera, las pérdidas de peso serán inferiores a las de las vacas no suplementadas, manteniendo una buena condición corporal.
•             En el manejo de problemas zoosanitarios se recomienda: plan de vermifugación estratégica, control de ectoparásitos, vitaminizar, vacunaciones estratégicas, vacunaciones contra encefalitis venezolana y control de desperdicios orgánicos.
En la agricultura:
•             Preparar el suelo con arado de chuzo o de cincel.
•             Incrementar el uso de abono orgánico.
•             Mantener coberturas vivas y/o muertas en el suelo.
•             Evitar el sobrelaboreo del suelo, optando por la labranza mínima, labranza cero o arar con cincel.
•             Incorporar residuos vegetales o materia orgánica al suelo.
•             Riego por aspersión: este método aprovecha el calor que se desprende durante la formación de hielo. Se trata de utilizar un sistema de riego por aspersión para “aislar” las plantas contra las temperaturas bajas. Se debe empezar a aplicar agua a las plantas apenas llegue la temperatura del aire a 0ºC. Eso mantiene a las plantas “aisladas” con una capa de agua que se va congelando y desprende calor. Para que este método funcione, se debe estar pendiente para seguir asperjando agua hasta que la temperatura suba a menos 1ºC, lo que se puede confirmar con un termómetro calibrado colocado en el punto de elevación más bajo, y descongele el hielo en las plantas.
•             Acolchados térmicos: cuando se colocan acolchados térmicos encima de los cultivos de hortalizas por la tarde al anticipar una helada, se mantiene una temperatura varios grados más alta debajo de los acolchados.
•             Productos protectores: en el mercado se encuentran varios productos que se aplican por aspersión para ayudar con este problema. Algunos de estos, podrían proteger toda la planta hasta varios grados menos que su punto de congelación normal con una aplicación antes de que bajen las temperaturas. El efecto protector podría durar hasta seis semanas, pero sólo a temperaturas hasta menos 5º C.
•             Inundación de terrenos, que aumenta la capacidad calórica del suelo y su conductividad térmica.
•             Mezcla mecánica de aire, consiste en mezclar, con ayuda de grandes hélices, el aire frío cercano al suelo con el aire cálido de las capas atmosféricas más altas.
•             Protección por interrupción de la radiación, consiste en evitar las pérdidas por radiación usando algún tipo de “techo” sobre la vegetación.
•             Calentamiento del aire que rodea a la planta, consiste en calentar el aire frío que rodea a la planta, ya que es este el que provoca el enfriamiento de los vegetales. Uno de los métodos más utilizados es encender quemadores (tarros) de petróleo, 100 a 300 por hectárea. Otra alternativa, son los agitadores de aire caliente o los quemadores a gas. Está prohibido la quema de llantas para el calentamiento del aire.
•             Aislamiento térmico: es posible optimizar el balance de radiación y energético sobre un cultivo cubriendo las plantas con determinadas clases de materiales durante la noche. Dentro de los materiales utilizados se encuentra el plástico en distintas variedades. Sin embargo, este plástico posee una serie de requisitos en cuanto a sus características: baja emisividad, baja conductividad térmica e intercepción de la radiación de onda larga.
 •            Es importante que durante el día las plantas y el suelo se encuentren descubiertas para poder almacenar energía solar. Luego en la tarde son cubiertos. Es necesario que el material no entre en contacto directo con la especie vegetal a proteger.