El compos lo mezclamos con tierra negra y las semillas las conseguimos seleccionándolas del material orgánico y procedimos a sembrar. |
Seleccione mi basura durante unas
cuatro semanas y sugerí a diez familias
hacer lo mismo. Los materiales orgánicos
los separamos y fuimos creando compos.
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El desarrollo de agriculturas alternativas es necesariamente una necesidad en los contextos de la humanidad contemporánea.
Decidimos, observar una posibilidad usando nuestra basura orgánica y nos esta dando buenos resultados.
No invertimos dinero liquido, todo el material nos costo cero pesos, pues la basura orgánica es desechada, la tierra negra la adquirimos de remociones cercanas a la localidad Cuarta de San Cristobal en Bogotá en Asocio con una Cooperativa Local.
No pretendemos enriquecernos en el sentido capitalista del termino; pretendemos reutilizar y reciclar de tal manera que podamos administrar recursos desperdiciados y mejorar las condiciones de vida de algunos núcleos familiares.
El ejercicio se inicio como un experimento para presentar en un proceso de capacitación y formación académica; pero viene convirtiéndose en una interesante actividad colectiva de trabajo en el que mezclamos elementos tecnológicos y conocimientos tradicionales.
Algunas plantas prosperaron y han alcanzado a producirnos algunos alimentos, en mi caso particular es de destacar que al vivir solo muchos de los alimentos producidos logran contribuir a mi dieta alimenticia.
Por cierto no soy vegetariano así que aun debo comprar alimentos en la tienda, desde luego aun no he logrado un punto de desarrollo de mis plantas como para producir alimentos suficientes que cubran toda la dieta alimenticia; pero si produje un buen numero de frijoles que sirvieron muy bien para una sabrosa frijolada. En casa de mamá donde los lleve para prepararlos.
También logramos la producción de perejil muy útil en las cocinas, según leímos excelente para el corazón. Es una interesante experiencia. No pretendemos cambiar la forma de producir a alimentos en el planeta, pero si en nuestras casas y contribuir con una propuesta para la generación de alimentos orgánicos y económicos