Velódromo de altura en Mosquera.
En la pintoresca localidad de Mosquera, Cundinamarca, emerge majestuoso el velódromo de altura, una obra maestra arquitectónica y deportiva que ha requerido una inversión sobresaliente, superando los 68.300 millones de pesos.
Este proyecto, concebido con una visión audaz, no solo se erige como una estructura imponente, sino que también encarna un compromiso sólido con el fomento del ciclismo de alto rendimiento en la comunidad.
Cada detalle de las curvas y rectas de este velódromo ha sido diseñado con meticulosidad, con el objetivo de maximizar el rendimiento y la emoción en todas las competiciones.
La construcción de este escenario deportivo excepcional no solo responde a la necesidad de contar con instalaciones de primer nivel, sino que también se posiciona como un regalo significativo para Mosquera, destinado a convertirse en un referente nacional en el ámbito deportivo.
Con una capacidad para albergar a 2.000 personas, el velódromo de altura está destinado a elevar el estándar de los eventos ciclísticos, atrayendo a atletas de élite que buscarán desafiar sus límites en este enclave deportivo único.
Cada detalle de las curvas y rectas de este velódromo ha sido diseñado con meticulosidad, con el objetivo de maximizar el rendimiento y la emoción en todas las competiciones.
Más allá de ser simplemente una instalación deportiva, se erige como un símbolo elocuente de la ambición y dedicación de la comunidad de Mosquera hacia la búsqueda incansable de la excelencia en el deporte.
El velódromo de altura de Mosquera no solo se presenta como una joya arquitectónica, sino como un testimonio tangible del compromiso y la determinación de la comunidad en su apuesta por destacar en el escenario deportivo nacional e internacional