El chocolate: el líder indiscutible de los snacks para momentos de indulgencia

 Por. Editson Romero Angulo

Periodista

En una esquina cualquiera de Bogotá, una madre abre su bolso y saca una pequeña tableta de chocolate para calmar el llanto de su hijo. En una oficina del centro, un diseñador gráfico se toma un respiro entre reuniones y muerde un trozo de Milka con café. En una tienda de barrio, una pareja elige entre Toblerone y Cadbury para acompañar su caminata vespertina. No es coincidencia. Es chocolate. Y es, según cifras recientes, el snack que mejor representa el placer cotidiano en América Latina.

🟤 Un bocado de emoción

De acuerdo con el último estudio State of Snacking de Mondelēz y The Harris Poll, el 73% de las personas afirma que no puede imaginar un mundo sin chocolate. Este dato, que creció 6 puntos respecto a 2023, no solo revela una preferencia alimentaria: habla de una conexión emocional. El chocolate no se consume únicamente por hambre, sino por necesidad de pausa, de consuelo, de celebración. Es el snack que mejor encarna la indulgencia, superando a las galletas, el helado y las palomitas, según el 82% de los encuestados.

En Colombia, esta tendencia se refleja en cifras contundentes. Según Euromonitor, en 2024 se proyectó un consumo de 14,8 mil toneladas de chocolate, con un valor de mercado superior a los COP 1,208 mil millones. Las tabletas lideran la categoría, con 8,2 mil toneladas y ventas por COP 546,8 mil millones. Pero detrás de estos números hay historias, rituales y memorias que se activan con cada bocado.

🍫 Tradición, innovación y propósito

“El chocolate es parte de nuestra tradición afectiva. En cada bocado hay historia, tradición y un instante de felicidad que conecta con la gente”, afirma Luis Gutiérrez, Gerente de Sostenibilidad y Asuntos Públicos de Mondelēz. Y esa conexión se fortalece con la innovación: mezclas con frutas tropicales, café colombiano, sal marina o incluso ají, que transforman el cacao en una experiencia sensorial única.

Pero el chocolate también está cambiando desde su raíz. La conciencia sobre el origen del cacao y las prácticas sostenibles ha crecido. Proyectos de comercio justo, apoyo a comunidades cacaoteras y producción responsable están posicionando al chocolate como un producto que no solo entrega placer, sino también impulsa el desarrollo social y económico.

🌍 Un puente entre generaciones

En tiempos de hiperconectividad y estrés, el chocolate se ha convertido en un aliado para la desconexión. El 81% de los consumidores lo elige para momentos de bienestar, y el 73% prefiere una porción pequeña de un snack indulgente antes que una versión reducida en grasa o azúcar. Es un símbolo de autenticidad, de volver a lo esencial, de regalarse un instante sin culpa.

Más que un producto, el chocolate es un lenguaje universal. Une generaciones, atraviesa fronteras y acompaña tanto los días comunes como los momentos extraordinarios. En América Latina, y especialmente en Colombia, sigue siendo el líder indiscutible de los snacks indulgentes. Y todo indica que su reinado está lejos de terminar.