Gobernación de Cundinamarca y CAR destinan más de $30.000 millones para reducir riesgos en la cuenca del río Bogotá
Por Editson Romero Angulo Periodista
Una respuesta integral ante el riesgo
"La intervención de estos puntos críticos es fundamental para la protección de las comunidades, pero también para preservar el equilibrio ecológico de la cuenca. Trabajaremos en conjunto con las autoridades locales, las comunidades y los expertos en medio ambiente para garantizar que las soluciones sean eficaces y sostenibles a largo plazo", afirmó Nicolás García, Gobernador de Cundinamarca.
Proyectos clave para mitigar los riesgos
La implementación de soluciones basadas en la naturaleza también tiene un papel destacado en este proyecto. Además de reducir la vulnerabilidad a desastres, estas soluciones buscan restaurar la capacidad de los ecosistemas para regular el ciclo del agua y reducir la erosión del suelo, factores fundamentales para mitigar los efectos de las lluvias intensas y las inundaciones.
Beneficios para la comunidad
El impacto de este proyecto será significativo tanto para las personas como para el medio ambiente. A través de una intervención estratégica en puntos críticos, se espera reducir las pérdidas humanas y materiales, además de mejorar las condiciones de vida en áreas que, históricamente, han sido muy afectadas por la inestabilidad del terreno y el cambio climático.
Los 11 municipios beneficiados —incluyendo Facatativá, Mosquera, Funza, Madrid, y Soacha, entre otros— verán una disminución sustancial en los riesgos de deslizamientos y las consecuencias de las fuertes lluvias. Asimismo, las acciones de restauración ecológica contribuirán a la recuperación de la biodiversidad en la cuenca, lo cual es esencial para la protección de las fuentes hídricas y la calidad del agua.
Un modelo de gestión del riesgo y sostenibilidad
“La alianza entre la Gobernación y la CAR demuestra que la gestión del riesgo no es solo una tarea gubernamental, sino una responsabilidad compartida con las comunidades. Por ello, estaremos trabajando de la mano con los habitantes de la región para que se apropien de las medidas de prevención y protección”, expresó Nubia María Suárez, directora de la CAR.
El futuro de la cuenca del río Bogotá
Este es solo el primer paso en un largo camino hacia la transformación de la cuenca del río Bogotá en un ecosistema más protegido y habitable para las generaciones venideras. La coordinación entre las autoridades regionales y la participación activa de las comunidades serán claves para el éxito de esta ambiciosa estrategia.
Con este plan, Cundinamarca se posiciona como un modelo de gestión del riesgo y sostenibilidad ambiental, destacándose por su capacidad para implementar soluciones innovadoras y eficaces frente a los desafíos del cambio climático.