Por. Editson Romero Angulo
Periodista cundinamarqués
Medio siglo de tradición musical
La ciudad de Villeta,
reconocida como la “Ciudad Dulce de Colombia”, se prepara para conmemorar la quincuagésima
edición del Festival Departamental de Bandas, un certamen que desde
1975 ha sido eje de formación, proyección artística y hermandad regional.
Declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Nación, este
festival es considerado el más antiguo e importante de su categoría en el país
Participación y homenajes
Durante tres días, del 21 al 23 de noviembre de 2025, el municipio recibirá a 28 agrupaciones musicales provenientes de diferentes rincones de Cundinamarca, con la participación de más de 1.300 músicos en diversas categorías: infantil, juvenil, mayores, tradicional fiestera y especia.
Uno de los momentos más significativos será el homenaje a cinco compositores cundinamarqueses, quienes han dejado huella en el repertorio y la identidad musical del departamento. Este reconocimiento busca resaltar la importancia de la creación artística local y su aporte a la memoria cultural.
Villeta, capital musical de Cundinamarca
El festival reafirma a Villeta como la capital musical de Cundinamarca, un título que se suma a su identidad como epicentro cultural y turístico. Más allá de la competencia, el encuentro se convierte en un espacio de integración comunitaria, donde la música de bandas fortalece el sentido de pertenencia y la transmisión de valores culturales entre generaciones.
Impacto cultural y educativo
El Festival Departamental de Bandas ha sido
clave en la formación musical de niños y jóvenes, consolidando
procesos pedagógicos y comunitarios que han permitido que la tradición de las
bandas se mantenga viva. Su permanencia durante cinco décadas refleja el
compromiso de las instituciones y la ciudadanía con la preservación de este
patrimonio.
Conclusión
La celebración de los 50 años del Festival Departamental de Bandas en Villeta no solo marca un hito histórico, sino que también proyecta el futuro de la música de bandas como símbolo de identidad y orgullo cundinamarqués. Con la participación masiva de agrupaciones y el homenaje a compositores, el evento promete ser una fiesta cultural que reafirma la riqueza artística del departamento.