Están llamados todos
los productores del agro, organizaciones sindicales y sociales a
participar masivamente en la movilización para hacer un llamado al Gobierno.
El paro va encaminado según Roberto Botero, vocero de
Dignidad Arrocera, a manifestar el inconformismo y la crisis que se
presenta con el incumplimiento de los
acuerdos pactados por MinAgricultura en
el año 2017 y la negativa de la Industria en participar este año del programa
“incentivo al almacenamiento”, sumado a los incumplimientos del Gobierno desde
el año 2013 a todos los productores nacionales.
Departamentos
productores de diferentes géneros
de la producción agropecuaria como Tolima, Huila, Meta, Casanare, y regiones
como Nariño, Vichada, Norte de Santander, Cesar, Montería, Antioquia y
Magangué, se concentrarán para exigir cumplimientos de los compromisos pactados
con MinHacienda y MinAgricultura. La movilización conjunta tiene como objetivo
fortalecer la voz de protesta y exponer su inconformismo con la imposición de
precios basados en la producción
extranjera sin tener en cuenta la situación interna del país, los costos
y el mercado interno.
Según Botero, el Ministerio de Agricultura no tiene los
recursos que prometió y por ello ha estado dilatando el respeto de los
acuerdos, lo que puede llevar a una crisis, lo cierto es que el gremio no van a
aguantar más prolongaciones a la situación y exigirán a nivel nacional que los
acuerdos sean tomados como prioridad y que no pase a segundo plano sin hallar
una solución.
Algunos de los puntos principales incumplidos que Dignidad
Agropecuaria Colombiana (DAC) quiere
hacer sentar como voz de protesta es la deuda agrícola por parte del Gobierno
Nacional. La política que amenaza con desplazar a miles de campesinos de los
páramos y territorios fértiles, el ataque de multinacionales mineras que con la
exploración y uso de la fracturación hidráulica genera graves problemas en el
suelo, la burla de los acuerdos y la
invalidez de las consultas populares y
decisiones de los pobladores de las regiones productoras de alimentos de
Colombia.
Los puntos a defender en el paro son:
1) No a los TLC: Exigimos revisión y reconsideración de los
TLC con EE.UU y la Comunidad Europea.
2) No a las importaciones de productos que se pueden
producir en nuestro territorio.
3) Exigimos control al contrabando.
4) Exigimos recursos amplios y suficientes para
investigación, ciencia y tecnología.
5) Exigimos precios justos y remunerativos a nuestras cosechas.
6) Exigimos garantía de comercialización de nuestras
cosechas.
7) Costos de producción: Exigimos control al precio de los
insumos.
8) Exigimos créditos suficientes, con plazos amplios, de
fácil y oportuno acceso, a bajas tasas de interés. Que sean realmente créditos
de Fomento e inversión a la producción agropecuaria.
9) Deudas: Exigimos el cumplimiento del alivio a las deudas
de los productores agropecuarios tanto con el sector financiero como con el
Agrocomercio.
De igual manera vamos a exigir el cumplimiento por parte del
Gobierno Nacional de los compromisos adquiridos por el Ministerio de
Agricultura con los productores arroceros.
1) Apoyo a la comercialización de arroz mes de junio.
2) Apoyo a la comercialización de arroz de julio 1 a agosto
24 por 60 mil millones de pesos.
3) Completar Apoyo a la comercialización de arroz por valor
aproximado a 31 mil millones de pesos del 24 de agosto al 15 de noviembre.
4) Control de la SIC (Superintendencia de industria y
comercio) a la imposición de precios, formas de pago y aplicación de normas de
calidad a nuestro producto por parte de la industria.
5) Acceso a mercados de exportación de arroz.
6) Acceso a subastas institucionales: compras públicas.
Adjuntamos comunicado de Dignidad Agropecuaria Colombiana
COMUNICADO
Por el Agro, el Trabajo y la Soberanía Nacional,
¡Movilicémonos el 12 de octubre!
El 1 de septiembre se
reunió en Bogotá la Dirección Nacional de Delegados, DND, de Dignidad
Agropecuaria Colombiana. La reunión tenía como esencia analizar la situación en
que se encuentra el Agro Nacional y tomar las medidas necesarias para enfrentar
la crisis que padece. Aunque en varios géneros agrícolas y pecuarios somos
autosuficientes, se sigue importando alimentos. Tratados de Libre Comercio con
Estados Unidos y la Unión Europea así obligan. Se crea sobreoferta y se
deprimen los precios en el mercado interno lo que, a su vez, genera quiebra y
ruina para los productores nacionales.
Leche, Arroz, Cacao, Maíz Blanco, Etanol, Biodiesel a base
de Palma Africana, Papa y Cebolla por lo menos, al igual que Cerdo y Pollo, son
bienes agrícolas que los productores agropecuarios del país producen con
autosuficiencia. Sin embargo, todos ellos tienen autorización para ingresar al
mercado nacional, con aranceles cada año más rebajados o sin pagar arancel y,
ante la crisis de sobreoferta que generan, el gobierno actúa con beneplácito
ante importaciones y Tratados y con mano dura o con engaño ante los productores
del país.
Ante esta realidad y ante la que viven quienes siembran
plátano, yuca, ñame, piña, guayaba y otros frutales o producen queso y otros
derivados de la leche, se decidió promover y realizar una movilización para
exigir la renegociación de los Tratados de Libre Comercio, TLC, por el grave
daño que causan a la economía de los productores agropecuarios, los
trabajadores del campo y los municipios que derivan la mayoría de sus ingresos
de dichas labores.
Si el café, el banano, el plátano de exportación, las flores
y otros dos o tres productos del agro tienen ingresos no ruinosos se debe a la
devaluación del peso pero, en la medida en que los costos de producción se
acerquen a los precios de venta o se caiga el precio de venta de los mismos en
el mercado internacional, se volverá a la situación de quiebra y ruina para los
agro-productores, ya sean campesinos, indígenas o empresarios agrícolas
nacionales.
La política de “Colombia Siembra” de este gobierno se quedó
en “Colombia Quiebra al Agro”. No se hizo bien la tarea. El Ministro Iragorri
prometió garantizar precios justos y remunerativos para quienes se atrevieron a
sembrar. Hoy, quienes lo hicieron, están amenazados con ruina en sus parcelas y
con hambre en sus hogares.
Se evaluó el incumplimiento de los acuerdos, sobre deudas
agrícolas, por parte del gobierno nacional, la política que amenaza con
desplazar a miles de campesinos de los páramos, la agresión de multinacionales
mineras que con la exploración y uso de la fracturación hidráulica, o Fracking
como se le conoce, burla los acuerdos, las consultas populares y las decisiones
de los pobladores de las regiones productoras de alimentos del país.
Se vio también el daño que a la producción causa la falta de
distritos de riego y drenaje, el elevado costo del crédito, el abuso de los
monopolios que controlan el mercado de insumos y abonos necesarios para el
agro, el mal estado de las carreteras terciarias o la falta de ellas, los
exagerados impuestos prediales y la eliminación de los subsidios en energía
para los estratos 1, 2 y 3.
El agro demanda un aumento sustancial en el presupuesto
nacional pero vemos que cada año se recorta más. Así no es posible tener
agricultura y agricultores prósperos. Por eso, a los productores agropecuarios
les causa dolor de patria la horripilante corrupción que prevalece en el
Gobierno, el Congreso de la República y la Justicia. Con ahincó condenan el
saqueó que grandes monopolios nacionales y extranjeros hacen al fisco y exigen
se devuelvan los recursos del Banco Agrario.
Párrafo aparte merece la comercialización de los productos.
Los precios de compra de los géneros agrícolas, en el mercado interno, no puede
seguir determinados por el precio internacional. Nos oponemos a que se obligue
a tomar precios de referencia externos sin tener en cuenta los costos de
producción internos y sin agregar una tasa de ganancia para el productor
nacional. Con esa política se continuará reemplazando trabajo y producción
nacional por trabajo y producción extranjera y sin tener en cuenta que Estados
Unidos y la Unión Europea destinan miles de millones de dólares y euros para
subsidiar sus agricultores.
Por eso, debe elaborarse una política de protección del agro
nacional y un Plan de Reactivación de la Agricultura Nacional, PRAN, que
arranque renegociando los TLC y reemplazando las importaciones de alimentos por
alimentos producidos en Colombia.
Con este análisis el 1 de septiembre de 2017, Dignidad
Agropecuaria decidió organizar y participar, con otras organizaciones
sindicales y sociales en la realización de una Movilización Agropecuaria
Nacional. Esta se acordó para el próximo 12 de octubre. Muchas regiones se
movilizaran, en especial, las zonas productoras de arroz y maíz, arruinadas por
los bajos precios y los incumplimientos del gobierno nacional. Dignidad
Agropecuaria Colombiana reafirma su voluntad de participar en la Jornada del 12
de octubre y llama a los productores del agro a participar de la misma.