Por. Editson Romero Angulo
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Resumen
La virilidad, entendida como un conjunto de virtudes asociadas a la responsabilidad, la fuerza protectora y la integridad, ha sido tradicionalmente malinterpretada como una manifestación de machismo. Sin embargo, la virilidad puede separarse de las estructuras opresivas y tóxicas, constituyéndose como un principio complementario a otras perspectivas, incluyendo el feminismo. En un mundo que parece cada vez más adverso a los principios naturales, analizar el valor de la virilidad permite entender cómo las fuerzas humanas pueden alinearse con la armonía natural y social. Este artículo explora la distinción entre virilidad, machismo y feminismo, y argumenta que la virilidad debe redefinirse en términos de equilibrio y virtud para enfrentar los retos contemporáneos.
Introducción
La sociedad contemporánea enfrenta un desafío en la redefinición de los roles de género, particularmente en la forma en que se perciben los conceptos de masculinidad y feminidad. El concepto de virilidad, frecuentemente confundido con el machismo, puede ofrecer un enfoque alternativo que no busca la opresión, sino el equilibrio con las dinámicas sociales y naturales. En contraste, tanto el machismo como el feminismo radicalizado suelen ser vistos como posiciones extremas que pueden desvirtuar la esencia humana y su relación con la naturaleza. Este artículo analiza cómo un entendimiento saludable de la virilidad puede contribuir a la construcción de un mundo menos adversario a la naturaleza y más alineado con principios de responsabilidad y armonía.
Virilidad frente al machismo y el feminismo
En este sentido, el machismo utiliza la fuerza como medio de control, mientras que la virilidad utiliza la fuerza como medio de protección y colaboración. Del mismo modo, la virilidad no se opone al feminismo en su esencia igualitaria, sino que busca un equilibrio de roles donde ambas perspectivas se complementen en lugar de confrontarse.
Un mundo adversario de la naturaleza
La crisis ecológica y social contemporánea es una manifestación de la desconexión entre los seres humanos y los principios naturales. Las dinámicas de género que refuerzan antagonismos, ya sea a través del machismo o del feminismo radical, contribuyen a esta desconexión al ignorar la interdependencia inherente entre los individuos y el entorno.
La virilidad, en este contexto, puede actuar como un puente para reconciliar la relación humana con la naturaleza. A través de valores como la responsabilidad y la acción orientada al bien común, la virilidad redefine la fuerza como una herramienta para la sostenibilidad y la preservación, en lugar de la explotación.
Redefiniendo la virilidad como un valor natural
La virilidad saludable no busca imponerse, sino integrarse en un sistema de valores compartidos que promueva la coexistencia y el respeto mutuo entre géneros y entre los humanos y la naturaleza.
Conclusión
Glosario
- Virilidad: Conjunto de virtudes asociadas a la fuerza, la integridad y la responsabilidad.
- Machismo: Actitud que promueve la superioridad masculina y la dominación sobre otros géneros.
- Feminismo: Movimiento social que busca la igualdad de derechos entre hombres y mujeres.
- Naturaleza: Conjunto de elementos y fuerzas que constituyen el entorno físico y biológico.
- Toxicidad social: Conductas o sistemas que generan daño en las relaciones humanas y sociales.
Bibliografía
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