miércoles, 18 de noviembre de 2015

La acción democrática del ciudadano no termina con el voto, todo lo contrario se inicia el ejercicio ciudadano.

Por: Editson Romero Angulo
Periodista y Educador.
Dos acontecimientos extraordinarios determinaron la historia del siglo XX y mantiene su influencia en el siglo XXI. La Revolución Bolchevique de 1917. El desarrollo de ésta revolución coloco un estado en manos de obreros y campesinos pobres. Esto permitió que en 1918 se elevaran a legislación los derechos del pueblo trabajador y explotado. Derechos que fueron negados por la monarquía zarista por más de tres siglos. No se puede olvidar que después de la guerra de Crimea, se desarrollaron revueltas campesinas que obligan a la autocracia a la abolición de la servidumbre en 1861 pero esta no significo que se aboliera la explotación y opresión del campesinado ruso. Los bolcheviques mantenían contacto con los trabajadores así que estos derechos de la nueva Rusia Soviética se integraron  a la construcción de la nación obrera. En ese mismo de 1918 la libertad individual fue conectada con los derechos sociales y elevados a  norma constitucional, por primera vez en la historia.
En 1919  la Constitución Alemana, reconoció derechos sociales sin perjuicio de las libertades individuales. El Estado Social De Derecho implica el reconocimiento de unos mínimos vitales a todos los ciudadanos, así que este estado  que posee territorio, población y autoridad es un estado intervencionista, planificador, ejecutor y evaluador de planes, programas y proyectos para el desarrollo.  El estado social de derechos surge en tres tradiciones:
Liberalismo Clásico: en la cual se proclama la igualdad ante la ley; protección y acceso del ciudadano a sus libertades individuales. Separación de poderes legalidad y control constitucional.
Democracia Participativa. En la medida en que los ciudadanos participan en la deliberación frente a la toma de decisiones en las políticas públicas y posee además mecanismos de Control Social.
Socialismo Moderno. Que establece que la libertad solo se ejerce cuando existen condiciones materiales, sociales y culturales con el fin de lograr este fin se proclama la función social de la propiedad.
Colombia es según nuestra constitución  un Estado Social De Derecho, pero esto solo será real si el ciudadano ejerce los mecanismos de para la Participación.  La constitución  afirma:
“Artículo 2.  Son fines esenciales del estado servir a la comunidad promover la prosperidad y garantizar la efectividad, de los principios, derechos y deberes consagrados en la constitución; facilitar la participación de todos en las decisiones que los afectan y en la vida económica, política, administrativa y cultural de la nación; defender la independencia nacional, mantener la integridad territorial y asegurar la convivencia pacífica y la vigencia de un orden justo.
Las autoridades de la república están instituidas para proteger a todas las personas residentes en Colombia en su vida honra, bienes, creencias y demás derechos y libertades para asegurar el cumplimiento de los deberes sociales del Estado y de los particulares “
Este artículo constitucional nos muestra que la razón de existir del Estado Colombiano es propugnar por el pleno ejercicio de los derechos de los ciudadanos consagrados en la Carta política del 91 que particularmente encontramos en los Títulos; II De Los Derechos Y Las Garantías, III que permite definir quien tiene esos derechos, garantías  y deberes, IV De la participación democrática y de los partidos políticos; es menester recordar aquí  que el artículos 107,108,109,111,112  fueron  modificado por el acto legislativo 01 del 2003; modificaciones que buscaban uniformidad en la acción política por medio de partidos más fuertes y democráticos.
Es en general una invitación a la acción política por parte de los ciudadanos frente al que hacer público. El Titulo IV Capitulo nos señala las formas de participación democrática, mecanismos reglamentados por la ley 134 de 1994 mecanismos tales como; la iniciativa popular legislativa y/o Normativa, el referendo, consulta popular, Revocatoria del mandato, plebiscito, cabildo abierto.
Otra forma del ejercicio participativo y de control son las veedurías ciudadanas  reglamentadas por la  LEY 850 de 2003 y cada estamento de la sociedad entorno al cual se halla legislado tiene o posee mecanismos de control ciudadano y participación democrática (Seguridad social y Salud ley 100 1994 -  Servicios Públicos Ley 142 – educación Ley 115) cada ley tiene mecanismos propios de participación. La acción democrática del ciudadano no termina con el voto, todo lo contrario se inicia la etapa de control y vigilancia y de esto hace mucha falta en Colombia. No basta el tener derechos hay que ejercerlos. Un verdadero estado social de derecho solo es posible si y solo si los Ciudadanos están dispuestos a poner a funcionar el engranaje que le heredan largos siglos de luchas y aportes de la humanidad.
 Es preciso que el elector, forme frentes, comités, organizaciones, veedurías que impulsen la  vigilancia de las nuevas autoridades, que se amparen en la legislación de control ciudadano a la gestión pública.  Y Se guíen por los principios éticos básicos de la buena ciudadanía, cultivando valores cívicos como el respeto, la tolerancia y la solidaridad, concrétalos en  propuestas en los diferentes ámbitos del quehacer cotidiano, en lo barrial, en la UPZ,- buscando que sus esfuerzos  de vigilancia de lo público se manifiesten en el ámbito  Local, Distrital o  municipal y Nacional.  El Respeto por las  creencias, políticas, culturales y religiosas de todas las personas  es esencial para buscar acuerdos sobre los mínimos éticos y los máximos morales en el manejo de lo público y en la vigilancia de quienes están a cargo de los bienes del estado.

La ética debe ser la base para establecer acuerdos  internos a nivel de las organizaciones sociales , comunitarias y cívicas  para en el marco de una  sana convivencia y la construcción  interna se pueda la organización de control social convertirse en ejemplo  para la  sociedad en su conjunto siguiendo las políticas internas . Cuando no cumples las reglas, se rompe  la organización y destruyes el tejido social y la anarquía reina para bien de los corruptos que despilfarran los dineros públicos.

jueves, 5 de noviembre de 2015

Se ‘quemaron’ 9 concejales de Bogotá


Tomado del
El Nuevo Siglo

Al terminar  los escrutinios de las elecciones para Concejo de Bogotá, nueve dirigentes políticos pasaron de la unidad de cuidados intensivos al pabellón de quemados.
Estos resultados no afectan a la administración del alcalde electo Enrique Peñalosa, pues seguirá con las mayorías.
Los partidos que fueron más damnificados son el movimiento Progresistas, que pasó de 8 a 1 curul, La U (de 8 a 4) y la Alianza Verde (de 8 a 4).
Cambio Radical queda con 9 curules, el Centro Democrático asciende del cuarto al segundo lugar con 6 curules, seguido del Partido Liberal con 5 al igual que la Alianza Verde.
Los políticos más reconocidos que se encuentran en el pabellón de quemados son Javier Palacio, de La U, y Roberto Sáez, de la Alianza Verde.
En el caso de Palacio, los escrutinios le dieron al Centro Democrático 32.356 votos aumentando el umbral y la cifra repartidora. El resultado es que sale Palacio y sube Pedro Javier Santiesteban, hermano del saliente concejal del Polo Democrático, Orlando Santiesteban.
Palacio anunció que puso en conocimiento de la Registraduría y organismos de control las supuestas irregularidades de cómo recuperó el uribismo los votos.
“Sobre el terreno el partido Centro Democrático no ha recuperado más de mil votos en los escrutinios mesa a mesa y así quedó registrado mediante acta en cada comisión escrutadora e históricamente la diferencia entre el preconteo del día domingo y el escrutinio final no supera el 1 por ciento”, dijo.
En cuanto a Sáenz tuvo el problema de que las bases se le retiraron y otros se lanzaron a las juntas administradoras locales (JAL) y Concejo por su propia cuenta.
Otros actuales concejales quemados son Yezid García, Diego García, Diana Alejandra Rodríguez, William Moreno y María Fernanda Rojas, de la Alianza Verde; Sandra Jaramillo, de La U; y Olga Victoria Rubio, del MIRA.
La candidata de la Unión Patriótica (UP) Aída Avella, solicitó la apertura de 1.900 mesas donde no se registró un solo voto a su favor y pidió esperar el trámite de una acción de tutela que interpuso para abrir y volver a contar la totalidad de las mesas del Concejo de Bogotá.

Los concejales Lucía Bastidas, de la Alianza Verde, y Marcos Fidel Ramírez, de Opción Ciudadana, podrán dormir tranquilos ya que ayer quedaron confirmadas sus credenciales.

miércoles, 4 de noviembre de 2015

Formidable votación en blanco y no marcada el 25 de octubre

Autor invitado:
Juan Sánchez Ramírez
Promotor del Voto en Blanco

Hay una masa de votación que no es destacada ni reseñada por la gran mayoría de medios de comunicación. Diríamos que le tienen pánico pues aparece como un nubarrón en el horizonte, preludiando la tormenta que puede azotar a un régimen político en el cual hay millones que no creen. Nos referimos al voto en blanco; al cual hay que sumar, por el significado que igualmente tiene, los votos no marcados. Excluyo los nulos, porque en ellos se puede manifestar error del votante.

El cuadro siguiente, construido tomando los datos de que aparecían en la página oficial de la Registraduría Nacional el día 29 de octubre, habla por sí mismo.

Corporación
% mesas escrutadas
% votación
Votos depositados
Válidos
Blanco (B)
No marcados (NM)
Nulos
Total B+NM
% en B y NM respecto a depositados
Alcaldía
99,82
59,32
20.046.042
19.065.827
723.163
547.991
432.224
1.271.154
                    6,34
Gobernación
99,69
60,31
17.128.262
15.092.672
1.195.657
1.639.781
395.809
3.231.247
                  18,87
Concejos
97,84
57,6
19.466.636
17.819.582
1.106.088
774.373
872.681
2.753.142
                  14,14
Asambleas
98,25
58,92
16.732.650
14.015.958
1.854.623
1.916.069
800.623
4.571.315
                  27,32
JAL
98,92
54,44
9.107.676
7.626.951
2.063.032
1.015.876
464.849
3.543.757
                  38,91

El Voto en blanco expresa un repudio y rechazo al conjunto de las instituciones del régimen político y la decisión de un votante independiente (que no debe ni paga favores ni recibe dádivas de candidato o partido) de expresar con claridad ese rechazo.
Excepto en el caso de las alcaldías, el porcentaje de votos en blanco y no marcados supera a cualquiera de los partidos. A manera de ejemplo, mientras el total de votos para gobernaciones del partido de la U fue de 1.631.177, el total de votos en blanco y no marcados es 2.835.438 (1.195.657 en blanco más 1.639.781 no marcados). Para asambleas las cifras son 2.311.325 para las listas presentadas a nombre del partido de la U mientras que el total de votación en blanco y no marcada para esas corporaciones asciende a 3.770.692 (1.854.623 en blanco más 1.916.069 no marcados).
Nadie puede afirmar que el voto en blanco sea un voto “despolitizado” o “reaccionario”. Las prebendas que concede el estado a los votantes no alcanzan por sí mismas a explicar lo que es necesario señalar como un verdadero fenómeno en crecimiento en el país. Si se comparan la votación del Polo Democrático Alternativo con las masas de voto en blanco y no marcado los resultados deberían hacer reflexionar a los agrupamientos constitutivos del Polo respecto a cuál era la mejor opción para golpear al régimen político –como ellos de palabra proclaman.
Mientras el Polo obtuvo para concejos la suma de 690.431 votos, el total de voto en blanco casi lo duplica (1.106.088) y si se suman el voto en blanco y no marcado se obtiene 1.880.461, que casi llega a triplicarlo. El contraste es más marcado, a favor del voto en blanco y no marcado comparado con la votación al Polo, en las cifras de Asambleas: 435.121 para las listas del Polo frente a 1.854.623 votos en blanco para estas corporaciones y 1.916.069 no marcados, totalizándose entre blanco y no marcados 3.770.698; más de ocho veces y media la votación del Polo.
Las cifras de la votación en blanco y no marcado son altísimas, enormes, y  tienen una trascendental importancia política que habrá que analizar detenidamente. Desde el punto de vista de una opción revolucionaria, que planteó públicamente el llamado de unidad alrededor de esa opción a todas las fuerzas que se reclaman contrarias al actual régimen político –llamado que fue desatendido– tenemos que señalar que esos resultados del voto en blanco muestran un terreno fértil para propuestas de participación electoral que confronten a ese régimen.